Como adelantábamos hace unas semanas, Nintendo ha comenzado un tímido acercamiento hacia el mercado de los smartphones. Como bien decía su presidente Satoru Iwata, "no es tan fácil como llevar a Mario a los móviles", ya que la compañía basa principalmente su economía en las consolas portátiles como Nintendo DS y 3DS, que compiten desde hace unos años con multitud de dispositivos móviles como smartphones y tablets.
El modo en el que la compañía japonesa ha decidido acercarse a los smartphones es a través de la oferta de servicios, si bien, la explicación de los planes ha resultado de todo menos clara y sencilla. No se ha detallado exactamente qué servicios o qué aplicaciones planean llevar a estos dispositivos, pero sí parece que la idea es crear una rama independiente de los juegos de consola, que englobe negocios relacionados con servicios educativos y/o deportivos (como pudieron ser en su momento Brain Training o Wii Fit), y que éstos puedan ser disfrutados a través de consolas Nintendo y cualquier otro aparato multimedia, gestionado todo ello siempre desde la Nintendo ID Network. El objetivo de todo ello parece estar enfocado a conectar con un público mayor que el de las propias consolas Nintendo.
Esta expansión del negocio de Nintendo puede resultar decepcionante ante la posibilidad de ver un Mario en un iPhone o por qué no, un teléfono de la propia compañía. Sin embargo, Nintendo es una compañía muy tradicional y si por algo se ha caracterizado en la última década es por no apostar directamente por la tendencia general del mercado sino por diferenciarse. Ha de tomarse todo esto como un primer paso y en unos años, sobretodo en función de como continúe el sector portátil de la compañía, ver en qué acaba.
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